domingo, 24 de julio de 2011

Es que ya no queda educación

 Os voy a contar algo que me pasó, se supone que esto va de educación y de como se ha perdido, pero es que lo de la velocidad cuántica también me interesa.




Pues eso, imaginaros un día que estaba esperando el metro, en el sitio adecuado, por que los que viajamos en el sabemos donde hay que ponerse para que te toque la puerta... hasta la baldosa, vaya.
Pues eso, llega el metro y veo que el asiento al lado de la puerta está vacío, genial , me siento!!!
Entró y me sien... no, siiii, pero encima de una señora que os juro que entró por la puerta de al lado y llegó al asiento a una velocidad que ni los F1, de esas que las ves y te levantas, por que piensas que se mueve con dificultad... y que conste que siempre me levantó para las personas que creo que lo necesitan.
Pues vista y no vista oiga, la chica que iba a ser mi compañera de rozar muslo, me miró tan alucinada, como la miré yo... creo que pensamos las dos, coña con la señora y luego la dolerá todo. 
Pues me dijo como no eso de, es que ya no queda educación.... y sin asiento me quedé.


Os cuento otro caso, este le pasó a una amiga, más salá ella que las pesetas, que con euros no me suena.
Pues iba en metro y ella sentada, en una estación, entra la típica señora, que va arreglada y perfecta... vamos de las que se pasan la tarde subiendo y bajando las plantas de el Corte Inglés.
Bueno pues la buena señora, entra, mira y remira a toda esa juventud, que sentadita y bien sentadita, no se levanta para ella...Y de pronto dice eso de... 
Es que ya no queda educación!!!
A lo que mi amiga, que madrugaba más que el panadero y curraba de lo lindo y que aprovechaba esa vuelta a casa, para ir recuperando sueño, la contesta...
No señora, educación hay mucha, lo que no hay son asientos.


Con lo cual he llegado a la conclusión de que a la educación, se la ha cargado el transporte público... vamos que si!!

jueves, 21 de julio de 2011

Mis cosas

Cuando te sonrían, 
mira que lo hagan con los ojos
si no solo te están mostrando un rictus.

Si te gustan las sonrisas, regalalas
verás cuantas te devuelven.

Si alguien te hace daño sin intención, perdónale
cualquiera comete fallos.

Si alguien te hace poco daño, 
pero su intención era mala, apártate
 a partir de ahí, solo espera lo peor.

Recuerda que en todas las historias
hay dos versiones, no te posiciones a 
 no ser que sepas que estás en el lado correcto.

En la mirada de tu pareja, siempre tienes que ver amor
si un día no lo encuentras, haz por recuperarlo
pero si no puedes, es hora de buscar en otros ojos.

Defiende tus ideas sin enfrentamientos
pero si no te dejan más salida que luchar,
hazlo hasta el final.

La falsa modestia no sirve de nada, 
si sabes hacer algo bien y demostrarlo
presume de ello, si no es hipocresía.

No te creas mejor que los demás,
pero tampoco permitas 
que nadie te haga de menos.

Y recuerda que todo aquello que des,
será lo que recibas, así que da todo aquello 
que quieras para ti.

martes, 19 de julio de 2011

   SIN MIRAR ATRÁS




Salió corriendo, sin pararse a pensar... si lo hacia a lo mejor daba la vuelta y justo era eso lo que no deseaba.


 Necesitaba pensar como habían llegado ahí, que había pasado, no entendía dond se había ido todo lo que hubo entre ellos, donde se fue su historia, las risas, la complicidad... pero aunque no lo entendía, no estaba dispuesta a seguir viendo tanto desprecio e ironía en sus ojos, en los que antes solo veía amor.


 Y además ahora sí, lo sabía, lo había confirmado en sus respuestas, tenía a alguien, a alguien a quien le diría y daría lo que a ella le robaba... entonces se dio cuenta de que había salido sin las llaves, lo que hacía falta, si al volver tenía que abrirla y encima hacía algún comentario, no lo soportaría y lo que no quería es que viera el dolor que la infligía con su indiferencia. Decidió que aquello ya no la llevaba a ningún sitio, cogió el movil y marcó.


 Se asustó, notó a alguien detrás... se giró, con la sensación de que todo viene junto, pero era él, debió salir tras ella....


 Con sus llaves en la mano y con todo el cinismo de que era capaz, le preguntó.
-Como pensabas entrar bonita.


 No le miró siquiera... 
-Por que vas a volver.
  Ahí si que sacó el resto... parecía disfrutar humillándola.
-No


 Entonces si le miró y lo que vio en su ojos, no era ironía, ni rastro de esa chulería de la que hacía gala últimamente... vio algo muy parecido al miedo, al contrario que él no disfrutaba viendo eso en sus ojos, pero eso precisamente eso la dio fuerzas para hacer lo que sabía que tenía que tenia que hacer... darse cuenta que solo bajo una amenaza, parecía dar pasos atrás.


-No, no pienso volver, por lo menos no como piensas.
 Buscó en la agenda el número de Mamen... su Mamen, su hermana y gran amiga.
-Si 
-Puedes venir a buscarme.
-Como ahora
-Si
-Dame media hora
-Vale 


 Media hora después sonó el timbre, abrió y allí estaba Mamen con Carlos, el mejor hombre que se podía encontrar... que suerte había tenido ella. Cogió la bolsa, y se la echó al hombro.
-Solo eso, preguntó su hermana
-No mujer, se le escapó una risa, el fin de semana vengo a por el resto


 Esperó a oír algo por parte de él, una palabra que diera a entender que no quería que se fuera, por que sabía que una disculpa hubiera sido de película, pero nada...

 Salió al rellano y cerró la puerta, sin mirar atrás.